sábado, 29 de abril de 2017

ESTUPIDEZ HUMANA, FRASES SIN SENTIDO HUMANO.

Es increíble lo que las frases "cotidianas" pueden producir en las personas, los hombres no somos más hombres por ser fuertes, golpeadores, impositivos o por no ser mujer.

La violencia de género se demuestra de miles de formas, entre ellas: refiriéndonos de las mujeres como en estas estúpidas frases, o haciendo alusión a la homosexualidad masculina como un defecto, una debilidad, un problema o simplemente "bromeando" con ello.

Puedes tener más masa corporal o muscular, más bello en la cara o en el cuerpo, puedes alcanzar metas físicas, laborales, económicas o de cualquier tipo que otros no obtendrán nunca, pero eso no te hace más hombre, recuérdalo.

Por eso, como decía Gandhi: "Cuida tus pensamientos, porque se convertirán en tus palabras. Cuida tus palabras, porque se convertirán en tus actos. Cuida tus actos, porque convertirán en tus hábitos. Cuida tus hábitos, porque se convertirán en tu destino."

No es solo una frase, es física cuántica, los pensamientos están constituidos de energía y la energía ni se crea ni se destruye, solo se transforma, y en este caso, se transforma en mierda, mierda mental que hace al hombre violento, intolerante y torpe, no permitas que tu ignorancia "habitual", aprendida de generación en degeneración, se vuelva un problema para ti y menos para otros.

Obsérvate y cambia, deja los patrones idiotizantes y se un mejor hombre, uno de verdad, con principios como la honestidad, el respeto y la equidad, uno que reconozca que la mujer en sus diferencias físicas y emocionales es hermosa, es creativa y tan fuerte como tú, que tu como los demás seres humanos sienten y piensan aunque no lo hagan como tú.

Si eres hombre y actúas así, deja de hacerlo, obsérvate; si eres hombre y no actúas así, invita a otros a que no lo hagan, seguro tienes amigos que actúan y dicen estas u otras frases; si eres mujer, no permitas que esto te suceda, no te rías y no repitas estas u otras frases entre tus amigas, no sabes el daño que generas y cuando el boomerang que lanzas al decirlas o reírte al escucharlas volverá a ti.

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